Citricultura: El arte de producir frutos de calidad
La citricultura ha sido materia de producción de los ciudadanos hondureños desde hace ya un tiempo. El consumo propio por supuesto lleva acentuado muchísimo más rato, pero no es hasta los años 60’ que hablamos de una proliferación genuina de la comercialización industrial de los cítricos: Los limones y las naranjas cultivadas en Honduras son un referente actual de Centroamérica y Estados Unidos. Ha encontrado en ellos excelentes clientes y una demanda estable en ambos territorios. Panamá, Nicaragua, República Dominicana y algunas islas mexicanas consumen cítricos del país.
Es la calidad de la citricultura en el país lo que lo distingue del resto, la proactividad de la industria trajo como consecuencia importantes avances que han permitido que la misma crezca positivamente. Actualmente el 90% los cultivos de cítricos se basan en naranjas dulces. Una diferencia bastante grande con respecto a los otros, pero aun así la calidad de los limones, toronjas y otros cumplen con los estándares internacionales.
Todo es sobre las cualidades
Que la demanda por los cítricos esté en alza o sea constante, no es para nada una casualidad, todo viene del arduo trabajo los citricultores hondureños. Tener un cultivo no es tan fácil como se presenta, para tener una producción industrial se requiere de hectáreas y esos son muchos naranjos, hay que cuidarlos a todos para que el porcentaje de pérdida sea poco.
El cultivo convencional es muy común en la citricultura hondureña. Cuando lo mencionamos así hablamos del tratamiento de la tierra con abonos comunes o fertilizados, o el uso de pesticidas regulares para eliminar plagas u otras enfermedades en la planta.
No obstante la tendencia está cambiando en pro de la citricultura orgánica, la cual está aplicando grandes cambios en los métodos conocidos para el cultivo de cítricos. Lo que antes parecía estar aunado a la industria, hoy por hoy puede estar cambiando, con técnicas alternativas en el sembrado. Por ejemplo: La tala de árboles para habilitar más terreno al cultivo está siendo desplazada porque ahora se sabe que los mismos fomentan el crecimiento del fruto por la sombra que proveen y el oxígeno.
El impacto en la sociedad
Sin duda la citricultura ha fomentado el crecimiento de un mercado que si bien lleva varias décadas en el país, hoy está siendo emergente y tiene gran reconocimiento internacional. Esto ha sido grato para la economía hondureña que han visto las cifras de los últimos dos años el rubro de agricultura ascender, gran parte gracias a los cítricos.
Ese crecimiento económico también se refleja en el mismo desarrollo de la industria, para la cual cada día hay más participantes. Esto se traduce en muchos más puestos de trabajo para los ciudadanos. El departamento de Colón es reconocido como la capital cítrica de Centroamérica, Colon Fruit Company (COFRUTCO) se enorgullece de ser activos en el desarrollo de la industria y la citricultura en Honduras.